En esta sesión la profesora repartió entre los diferentes grupos distintos fragmentos de esta obra de Eduardo Galeano, en la que el autor utiliza la ironía y el ingenio para criticar duros temas de actualidad como pueden ser las multinacionales, la diversidad, el miedo global, el monopolio de la comunicación, juegos de guerra, la cátedra de la religión, armas y jóvenes, relaciones internacionales, drogas, etc.
En mi grupo trabajamos con el tema de la cátedra de la religión, trabajo que se puede ver en nuestro blog grupal.
A mí me gustáría hablar de un tema en concreto, de una parte que me llamó la atención, la frase de "miedo global: Miedo de la mujer a la violencia del hombre, miedo del hombre a la mujer sin miedo. Miedo de vivir." Ante este tema presento un gran enfado, enfado con la sociedad en general, sociead que como bien dice este tema nos da miedo. Tenemos miedo, debemos de tener miedo, de nuestro vecino de enfrente, de la persona que se sienta a nuestro lado en el autobús, de un compañero de clase e incluso de la persona con la que compartes el mismo techo y pertenece a tu familia... Me remonto algo más de diez años atrás en el tiempo, cuando todavía era solo una niña, y recuerdo que todos los chicos de la barriada, grandes y pequeños, bajábamos a la calle a jugar todos juntos, nuestras madres no tenían miedo. Las madres de hoy en día deben de tener miedo por lo que les pueda pasar a sus hijos, cualquier "tarado" puede acabar con la bella felicidad que les da la infancia. ¿Y qué decir de la situación de la mujer?, debe tener miedo de irse a vivir con su pareja porque aún pareciendo la persona más normal del mundo en un abrir y cerrar de ojos se puede convertir en su peor enemigo, se puede convertir en el culpable de su muerte. No podemos estar tranquilos, porque conforme van pasando los años en vez de avanzar vamos retrocediendo y no nos valemos de las palabras para arreglar las cosas, en la sociedad en la que vivimos abunda la violencia, ya no solo hay que tenerle miedo a algunos enfermos mentales que pueden perder la cabeza, ahora una gran parte de la sociedad parece sufrir problemas mentales. Por eso, debemos tener miedo, miedo de todo lo que nos rodea, por eso no podemos vivir seguros y tranquilos.
"El niño no es una botella que hay que llenar, sino un fuego que es preciso encender"
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